El solitario gol de Paulinho a tres minutos del final del duelo ante Rosario Central en el semidesierto Gigante de Arroyito convirtió el martes a Atlético Mineiro en el primer conjunto que aseguró su clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores. Cuatro victorias en cuatro presentaciones registra en el certamen continental el equipo sensación de Brasil, que cambió drásticamente su imagen en los últimos 45 días, desde el aterrizaje en su banco de suplentes de Gabriel Milito.
Ocho triunfos y cuatro empates acumula el Galo bajo el mando del exentrenador de Argentinos Juniors, Independiente, Estudiantes y O’Higgins de Chile. Esas 12 presentaciones sin traspiés constituyen la racha invicta actual más extensa entre los 124 conjuntos brasileños que participan en los cuatro certámenes nacionales de ese país, igualada con la que ostenta Botafogo de Paraiba, que milita en la Serie C.
Si se la contrasta con los equipos de mejor andar en este período en Europa, Atlético Mineiro también tiene motivos para sacar chapa: su registro es idéntico al de Manchester City en sus últimos 12 partidos y mejor al de Real Madrid (siete victorias y cinco empates). Solo Bayer Leverkusen, con nueve triunfos y tres igualdades, lo supera entre los que participan en las cinco ligas más poderosas del Viejo Continente.
Casi siete meses de descanso se tomó Milito después de renunciar a su cargo en Argentinos Juniors el 30 de agosto del 2023, tras la eliminación de su equipo en los octavos de final de la Copa Libertadores a manos de Fluminense y luego de 31 meses de trabajo. A fines de marzo, la dirigencia de Atlético envió a Buenos Aires a Victor Bagy, su director de Fútbol, para proponerle que tomara el mando de un equipo que estaba en las puertas de una instancia decisiva, pero atravesando días turbulentos.
Luiz Felipe Scolari había sido destituido tras el partido de vuelta de una de las semifinales del Campeonato Mineiro, en el que su equipo había perdido 2 a 1 contra América, aunque había avanzado a la final gracias al 2 a 0 en la ida. El rendimiento del conjunto no satisfacía a la dirigencia, los números no eran convincentes (cinco victorias, dos empates y tres derrotas en los 10 partidos disputados hasta entonces en 2024) y además el veteranísimo Felipão tenía una relación conflictiva con los simpatizantes y con la prensa.
Milito aceptó el reto y se convirtió en el 16° entrenador extranjero en la historia de Atlético y en el quinto argentino, tras Gregorio Suárez, Jorge Sampaoli, Antonio Mohamed y Eduardo Coudet. El 25 de marzo, el día en que el club celebraba 116 años de su fundación, condujo su primer entrenamiento en el predio Cidade do Galo. «Víctor (Bagy) me presentó toda la organización del club, el proyecto. Me demostró lo serio que era y por qué querían que yo fuera el entrenador. Eso fue muy importante. Me mostraron un análisis deportivo en profundidad, con jugadores de calidad”, explicó el DT en su primer contacto con la prensa brasileña.
Apenas cinco días después, le tocó debutar en una final: sus dirigidos empataron 2 a 2 como locales con Cruzeiro en la ida del cruce definitivo del Campeonato Mineiro. Ocho días después y luego de comenzar perdiendo por un gol de Matheus Vital, Atlético se impuso 3 a 1 en el desquite en el Mineirão con tantos del cordobés Renzo Saravia, Hulk y Gustavo Scarpa. Trece días después de haber aterrizado Belo Horizonte, Milito le dio al Galo su quinto título estadual consecutivo y el 49° en su historia.
Hulk, el hombre más experimentado de un plantel en el que abundan los jóvenes. Foto: Gustavo Garello.Desde entonces, las sonrisas abundan porque el equipo responde ante la exigencia. En el Brasileirão logró dos victorias y tres empates, y marcha cuatro detrás de Athletico Paranaense, Bahia y Botafogo. En la Copa do Brasil, encaminó su andar hacia los octavos de final la semana pasada con un triunfo 2 a 0 sobre Sport Recife en el duelo de ida de una de las llaves de la tercera ronda (la revancha será el 22 de mayo en Pernambuco). Y en la Libertadores solo sabe de festejos.
Los dos triunfos frente a Rosario Central, en su casa y a domicilio, y las victorias ante Caracas en la capital venezolana y Peñarol en Belo Horizonte le garantizaron precozmente el pase a los octavos de final y lo perfilan como candidato a quedarse con el número uno de la fase de grupos. “Tuvimos la oportunidad de ganar los cuatro partidos, que era lo que buscábamos, lo que queríamos y lo que conseguimos. Pero esto no termina acá. Tenemos que seguir. Fue un buen comienzo, pero no terminó”, advirtió el técnico de 43 años tras la victoria en el Gigante de Arroyito.
Los resultados no parecen ser consecuencia del azar. En Brasil se destaca la laboriosidad y la audacia de Milito para afrontar los partidos, y se resalta que está logrando este muy buen rendimiento con un plantel que integran tres futbolistas argentinos (Renzo Saravia, Rodrigo Battaglia y Matías Zaracho), pero que no tiene figuras estelares con aquellas con las que cuentan otros conjuntos brasileños como Flamengo, Palmeiras, Inter o Fluminense.
Alisson, uno de los juveniles a los que Gabriel Milito está dando tarea en Atlético Mineiro. Foto: Marcelo Manera / AFP.Además, en la dotación del Atlético abundan los juveniles: de los 31 integrantes del plantel, 11 son menores de 22 años. El pasado sábado, el DT hizo debutar al zaguero Rômulo, de 20 años, producto de las divisiones formativas del club. Y también les está dando cada vez más rodaje a los delanteros Alisson (18) y Cadu (19).
También el entrenador ha revalorizado a algunos hombres de experiencia. El defensor Jemerson era muy criticado por los hinchas el año pasado y ahora es uno de los pilares de la zaga. Y el mediocampista Gustavo Scarpa explotó desde que el nuevo conductor decidió moverlo desde el eje del terreno hacia la banda derecha y darle más libertad para participar en maniobras de ataque.
El exjugador del Nottingham Forest inglés y del Olympiakos griego no había rendido bajo las órdenes de Scolari. Desde que llegó Milito, marcó seis goles y dio tres asistencias. “Él es un jugador muy importante para nosotros y nos está ayudando muchísimo. Nos está dando muchas soluciones, goles, asistencias”, destacó el DT el fin de semana.
Gustavo Scarpa brilla en Atlético Mineiro desde la llegada de Gabriel Milito. Foto: Yuri Edmundo / EFE.Scarpa es uno de los tres hombres alrededor de los cuales orbita el ataque del Galo. Los otros son el veterano capitán Hulk y Paulinho, responsable de 7 goles y 3 asistencias en el ciclo del exjugador de Independiente, Zaragoza y Barcelona. “Milito llegó para sumar. Si bien casi no tenemos tiempo para entrenarnos, estamos haciendo las cosas bien y el equipo está encontrando su camino. Cada partido creamos más situaciones y las ideas se van aclarando”, valoró el martes el autor del tanto de la victoria ante Central en Arroyito.
La Copa Libertadores, un certamen que el elenco mineiro ganó en 2013, es el gran objetivo para este año tanto por el valor deportivo como por el rédito económico que ello le generaría. No solo por los premios que otorga la Confederación Sudamericana de Fútbol (el campeón puede embolsar hasta 39,5 millones de dólares), sino porque el título le daría el pasaje al multimillonario Mundial de Clubes 2025. A ese torneo solo podrá acceder si se consagra, ya que no puede hacerlo por el ranking de la Conmebol, debido a que ya hay otros tres conjuntos brasileños con lugar asegurado (Palmeiras, Flamengo y Fluminense).
Paulinho marcó cinco goles en los primeros cuatro partidos de Atlético Mineiro en esta edición de la Copa Libertadores. Foto: Franco Trovato Fuocoo / EFE.Para ello le faltan unos cuantos pasos, aunque el camino recorrido hasta el momento ha sido perfecto. De todas maneras, Milito no quiere perder la tranquilidad. La semana pasada, cuando los elogios abundaban en Brasil, contó que no se llevaba bien con los alabanzas desmedidas, pidió calma a la prensa y advirtió sobre los riesgos que podía generar el exceso de confianza.
“Prefiero tomarme las cosas con calma, seguir compitiendo con mucha humildad, mantener lo que hemos hecho bien y corregir algunos aspectos que podemos mejorar, pero con calma y tranquilidad”, avisó el exdefensor del seleccionado argentino. Y añadió: “Sabemos muy bien cómo es el fútbol, cómo pueden cambiar las cosas. Cuando ganás, todo parece mejor, el entrenador parece mejor, los jugadores parecen mejores. Cuando perdés, el entrenador es peor, los jugadores son peores, hay críticas. En el fútbol, lo que hoy está arriba puede bajar en una semana”.