Harry Maguire entró por Lisandro Martínez y rescató al Manchester United de una derrota en Portugal por la Europa League

De villano a héroe en la última jugada. Así es la vida de Harry Maguire en el Manchester United. El central inglés es resistido por los fanáticos de los Diablos Rojos, producto de malas actuaciones que lo llevaron a perder la titularidad, pero este jueves ingresó sobre el final del partido y se convirtió en el héroe del partido.

La noche de Oporto vivió un electrizante y cambiante partido entre Porto y Manchester United. El duelo de argentinos tuvo por el lado de los portugueses a Alan Varela y Nehuén Pérez; por el de los ingleses a Lisandro Martínez y Alejandro Garnacho (ingresó en el arranque del segundo tiempo), dejó un encuentro de ida y vuelta con un sube y baja de emociones. El United comenzó arriba 2-0, los Dragones empataron el encuentro en siete minutos y en el complemento se pusieron 3-2 arriba, pero sobre el final apareció Maguire para sentenciar el 3-3 en el último suspiro.

Marcus Rashford, de lo mejor del equipo inglés, aprovechó por izquierda los espacios de un equipo adelantado y con una jugada personal marcó el primer gol a los 7 minutos cuando la acción recién comenzaba. Con la primera mitad avanzada y con un Porto en busca del empate, los Diablos Rojos recuperaron la pelota, sacaron la contra rápido y aprovecharon nuevamente las falencias defensivas de la última línea del conjunto local. Rashford recibió en la cercanía del área, descargó con Rasmus Höjlund que se quitó la marca con una diagonal y remató al primer palo ante el achique de Diogo Costa, el joven arquero de la selección de Portugal, para marcar el 2-0 parcial.

Con el resultado en contra y un partido incómodo desde lo táctico, los dirigidos por Vítor Bruno sacaron pecho y a puro corazón llegaron al descuento. Diez minutos después Joao Mario envió el centro, Samu cabeceó, André Onana dejó un rebote vivo y Pepé se lanzó de palomita para marcar el 1-2.

Con la historia lejos de terminar, cinco minutos más tarde Samu se tomó revancha y sacó el grito sagrado de la garganta. Barajar y dar de nuevo. Joao Mario recibió de Nico González, de primera mandó un preciso centro al primer palo para que Samu le tirara el camión encima a De Light y se desató la locura en el Estadio do Dragão con el 2-2.

En el segundo tiempo, la historia cambió. Porto mejoró en su juego, llevó a los ingleses contra la valla defendida por el arquero camerunés que tras la salida de Rashford, para que ingresara el argentino Alejandro Garnacho, perdió poder en ataque. Cinco minutos pasaron desde el arranque del complemento y el local daba vuelta el marcador. González recibió en el circulo central, filtró un pase excepcional para la corrida de Pepé que al llegar al área asistió a ras del piso a Samu y marcó su doblete para el 3-2.

Pero Eric Ten Hag, DT del Manchester United, mandó a la cancha a Harry Maguire a falta de 15 minutos para el final en reemplazo de Licha Martínez, y cuando se jugó el primer minuto de adición apreció defensor inglés para elevarse más alto que todos y de cabeza marcar el 3-3 final y convertirse en el héroe de la noche de los Diablos Rojos.

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