A un mes de las elecciones porteñas más esperadas de los últimos años, Clarín analiza qué dicen las encuestas para esa pelea clave. Y la primera conclusión, a diferencia de otras disputas en CABA, es que el resultado final está abierto. Con un líder claro en estos primeros sondeos y tres empates muy particulares.
El que picó de arranque en la punta es Leandro Santoro, radical K, diputado nacional de la Ciudad por Unión por la Patria, y quien se presenta bajo el sello «Es Ahora Buenos Aires». Una de las varias estrategias de campaña para tomar distancia de Cristina en el distrito.
La pelea de arriba
El promedio de Santoro es 26 puntos, en base a 9 estudios, públicos y privados, que analizó este diario de consultoras como CB, Synopsis, Aresco, Circuitos, Proyección, Fixer, Tendencias, Federico González y Casa Tres.
Le alcanza para liderar en un comicio atomizado como pocas veces. El 18 de mayo se presentarán 17 listas para buscar 30 bancas de la Legislatura. Esa es la pelea formal. La real incluye un mano a mano entre el PRO y La Libertad Avanza para quedarse con el voto de la centroderecha, y algunos lanzamientos prematuros, como el de Horacio Rodríguez Larreta, que juega en 2025 para volver a la jefatura de Gobierno en 2027.
El apoyo a Santoro es sostenido y bastante parejo en todos los sondeos. Oscila entre 23 y 29 puntos. Parecen el piso y el techo, según admiten en su propio espacio. Son, también, números que el radical K ya supo sacar otras veces, pero que esta vez le alcanzarían para ganar.
Esto ocurre por la dispersión de la oferta. El PRO, por caso, que en sus últimas elecciones en la Ciudad como cabeza de Juntos por el Cambio orillaba tranquilo los 50 puntos, hoy no llega a 20 de promedio.
Su candidata, Silvia Lospennato, diputada nacional por la provincia de Buenos Aires, queda con 18% en el informe de Clarín. Pero con una amplitud mayor que Santoro: hay encuestas que le dan 24 y otras, menos de la mitad.
Como contó este diario, puede deberse a su alto nivel de desconocimiento: cercano al 50% hasta hace 15 días y hoy en el 35%, según dicen en el campamento amarillo. El primer objetivo básico de Lospennato será captar todo el voto del sello PRO que, aunque menguado, sigue siendo potente en CABA.
La candidata del PRO está apenas por encima en el promedio que Manuel Adorni. El vocero presidencial obtuvo 17%, también con números muy dispares: hay sondeos que lo ubican en 22 puntos y en otros no llega a 12.
La pelea del medio
Un escalón más abajo aparecen dos candidatos fuertes que, por distintas razones, decidieron/debieron presentarse por afuera de sus partidos originales, causándoles un claro daño a sus ex.
Se trata del mencionado Larreta y de Ramiro Marra, el legislador que fue expulsado de La Libertad Avanza cuando era número cantado para liderar la lista oficial. Ahora lo hará en una blue, apadrinado por la Ucedé, y promedia 8,7 puntos. Dos décimas abajo, en 8,5%, viene Larreta, con su Movimiento al Desarrollo (MAD).
Es una incógnita qué puede pasar con estos dos postulantes. Sobre todo si hay alguna polarización o pelea más fuerte, que impulse el voto útil y los tire para abajo, beneficiando a Adorni y Lospennato. Cerca de Larreta firman acercarse a los dos dígitos. Marra es, por naturaleza, más optimista.
La pelea de abajo
A grosso modo, podría decirse que debajo viene «el resto». Son 12 listas que probablemente se conformen con meter un legislador. Necesitan cerca de un 3%.
Los mejor posicionados en esa disputa son, por ahora, el Frente de Izquierda, un peronista coreano y dos desprendimientos de Juntos por el Cambio. Se trata de:
– Vanina Biasi (FIT-U): 3,9% promedio.
– Alejandro Kim (delfín de Guillermo Moreno): 3,4%.
– Lucille Levy (Evolución-UCR): 3%.
– Paula Olivetto (Coalición Cívica): 2,7%.
En las otras listas hay desprendimientos del PJ (Juan Manuel Abal Medina), libertarios (Yamil Santoro), nacionalistas (Mila Zurbriggen y César Biondini), «famosos» (Ricardo Caruso Lombardi por el MID), sindicalistas (Marcelo Peretta, el que promete remedio gratis) y más de izquierda y centroizquierda (Federico Winokur del Nuevo MAS y María Eva Koutsovitis, de Confluencia).
En el promedio que sacó Clarín, ese rubro «otros» llega a 2,8% y los «no sabe/no contesta», a 6%.