El Gobierno redujo los precios estacionales del gas pero aumentó los de la electricidad, lo que tendrá un impacto en las tarifas que deben abonar usuarios residenciales de ingresos altos y sectores productivos a partir de octubre.
La decisión de actualizar los precios estacionales energéticos fue llevada a cabo por la Secretaría de Energía mediante dos resoluciones publicadas este lunes en el Boletín Oficial «con el fin de mantener los precios y tarifas del sector en valores reales lo más constantes posibles», confirmando el nuevo peso de las tarifas de servicios públicos para los presupuestos familiares.
Por el lado de la luz, se definió que el Precio Estacional de la Energía Eléctrica (PEST) que se trasladará a las facturas a partir de octubre será entre 63.187 y$66.885 por kWh para los usuarios de ingresos altos y comercios e industrias. En tanto que los consumidores de ingresos medios y bajos siguen manteniendo las bonificaciones del 55 por ciento sobre el bloque subsidiado (250kw por mes) y del 64 sobre el bloque subsidiado (400kw por mes), respectivamente.
En ambos casos, Energía aclaró que sobre las actualizaciones establecidas, el Enre y el Enargas, junto a las jurisdicciones locales, definirán los nuevos cuadros tarifarios con los valores de transporte y distribución, según corresponda.
En relación al gas, la medida dispone una baja del 10,37 por ciento en el Punto de Ingreso al Sistema de transporte (PIST) pero al mismo tiempo aumenta un 2,7 por ciento las tarifas de transporte y distribución del hidrocarburo por redes.
De esta manera, el costo promedio del gas en el PIST pasa de estar en 3,46 dólares por millón de BTU a ubicarse entre 2,979 y 3,148 dólares, según la distribuidora. En tanto, el promedio país quedó en 3,09 dólares por millón de BTU.
El traslado de la reducción en los valores de producción de gas se realizará para los usuarios residenciales N1 (ingresos altos) y los sectores productivos (comercios y pequeñas industrias), mientras que para los usuarios N3 (ingresos medios) y N2 (ingresos bajos) se siguen manteniendo las bonificaciones del 55 y 64 por ciento sobre el consumo subsidiado, respectivamente.
«La actualización busca representar los costos reales y la variabilidad de abastecimiento de gas natural para las empresas distribuidoras», insistió la Secretaría de Energía.